Una alimentación saludable y balanceada previene enfermedades

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La Lic. en Nutrición informó que en este regreso a clases es importante que los papas manden desayunados a sus hijos a la escuela, ya que esta comida es la más importante ya que proporciona una cantidad necesaria de glucosa en la sangre, lo que hace que el cerebro funcione mucho mejor.

Agrego que si por alguna razón no puede desayunar el pequeño, lo mejor es mandar un refrigerio saludable, incluyendo los principales grupos alimenticios como: carne, fruta, verdura y cereal, esto evitará que el niño tenga apetito y consuma comida con alto contenido en energéticos que propician al sobrepeso y obesidad.

Para conocer el estado de los niños y niñas de Aguascalientes, García Gómez comentó que el ISSEA ha venido realizando actividades como: la evaluación del estado nutrición de los escolares, capacitación y orientación alimentaria a niños, padres de familia, maestros y concesionarios de tiendas escolares, además de dar un seguimiento y control a los infantes.

Señaló que personal de nutrición del ISSEA al inicio y final de de cada ciclo realiza evaluaciones escolar en los cuales se pesan, miden y se elabora una historia clínica nutricia a los niños.

Este estudio llevado a cabo al término del ciclo escolar 2011-2012, dio como resultado que el 29.8 por ciento de los niños tienen sobrepeso y obesidad, por lo que el resultado es muy similar a la ENSANUT 2006.

Recordó que de acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2006, (ENSANUT) en el Estado de Aguascalientes, el 31.6 por ciento de los niños en edad preescolar tienen sobrepeso y obesidad.

Indicó que se está en espera de los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012, la cual se va a poder medir las acciones que se han estado realizando para reducir las cifras de sobrepeso y obesidad en niños, además de cultivar cambios en hábitos alimenticios y de ejercicio que redunden en una mejor calidad de vida.

Finalmente la Responsable Estatal de Nutrición recomendó a los padres de familia proporcionar alimentos sanos a sus hijos, evitar comidas rápidas, bebidas azucaradas, además de crearles hábitos de activación física, estar al pendiente de cualquier cambio que ellos puedan tener referente a su peso ó hábitos de comida, pero sobretodo a predicar con el ejemplo.